Caviglia es un artista seducido por la memoria y apasionado por la intervención. Esto salta a la vista en el compendio de libros y lecturas que nos ofrece en esta muestra, donde uno y otro son ejemplo de esa naturaleza común. Su trabajo puede equipararse al de los poetas de la antigüedad, al de los aedos que recorrían los pueblos con los mitos a cuestas y al de los copistas medievales que llenaron los textos sagrados de interpolaciones. Sus ensamblajes son reminiscencias que han sido añadidas a otras reminiscencias. Son piezas provenientes de la intimidad colectiva, de las lecturas silenciosas hechas sobre historias que le pertenecen a todos los seres humanos. Por eso vemos en los libros citas que aterrizan en otras citas, imágenes-palabras y palabras-imaginarios, marcos que multiplican las referencias, falsos centros que invitan al movimiento y un juego de miradas que suscita el discurso y permite que nada deje de hablar.
Humberto Valdivieso
Los libros de Jesús Caviglia son libros vivos: libros que nos miran y que nos hablan, que nos transportan en nuestra imaginación y en nuestros sueños, son un camino en nuestros recuerdos y en nuestras vivencias de hoy.
Al verlos, tocarlos y repasarlos con nuestra mente, allí encontramos y nos reencontramos. Podemos hojearlos con nuestros sentimientos y con ellos acercarnos a nuestro ser, a nuestro yo individual y colectivo.
Un libro es más que un objeto de tinta y papel, un libro es parte de la experiencia humana y un anhelo por una vida mejor. Los libros de Caviglia ayudan a nuestro recorrido por ese pasado y en nuestra incesante búsqueda de los saberes por venir.
Aquiles Asprino Perozo
D’Museo